El PP condiciona la negociación de las Cuentas alavesas a una reforma fiscal y a eliminar el gasto superfluo

·       Marca como línea roja la reducción de altos cargos y eliminar subvenciones a “chiringuitos” utilizados como agencias de colocación

·       Oyarzabal censura que mientras los alaveses pagan 300 millones más al año en impuestos a la Diputación, sólo 40 se invierten en el territorio 

·       Afea que el Gobierno foral calle ante escándalos como el de la agencia aeroespacial y asegura que “Álava paga el pato por el poco peso que el PNV alavés tiene en Bilbao”

·       Advierte de que PNV y Bildu “juegan a la discrepancia” en el País Vasco, pero son “un mismo bloque de apoyo a Sánchez”

23 de noviembre de 2022. El PP de Álava ha condicionado la negociación del Proyecto de presupuestos de la Diputación foral a una revisión fiscal que repercuta en familias y autónomos y a la eliminación del gasto superfluo a través de la reducción de altos cargos del Gobierno foral y de la eliminación de subvenciones a “chiringuitos” utilizados como agencia de colocación.

Así se ha pronunciado hoy el presidente de los ‘populares’ alaveses y portavoz en Juntas generales, Iñaki Oyarzabal, que ha advertido además de que su formación pondrá el acento en los mayores y en la dependencia: “Tenemos que subir las prestaciones sociales a familias que tienen mayores y dependientes a su cargo”. Del mismo modo, ha marcado como ineludible el impulso de un “plan muy potente” de revitalización del comercio o Vitoria. 

Oyarzabal ha expuesto que las Cuentas del Gobierno foral de PNV y PSE son “una retahíla de proyectos que se acumularán en la lista de promesas incumplidas, porque después de 4 años vuelven a anunciar proyectos que han anunciado varias veces”. “Nos dicen que a hacer lo que no han hecho en ocho años; Ramiro González pasará a la historia como el diputado general que no cumplió prácticamente ninguna de sus promesas”, ha añadido.

Tras señalar de que mientras inversiones y proyectos se incumplen de forma sistemática, el PP alavés ha argumentado que los ciudadanos sufren una presión fiscal que ha generado una “recaudación récord” por parte de la Diputación “que no ha servido para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos”. En este sentido, ha destacado que si bien los alaveses pagan 300 millones de euros más en impuestos que hace un año, sólo 40 millones se invierten en el territorio. “El resto va al Gobierno vasco y al Gobierno central y no vuelve”, ha censurado.

El portavoz ha explicado que esta circunstancia hace que las instituciones alavesas sean corresponsables de lo que con el dinero de los alaveses hacen tanto el Gobierno vasco como el Gobierno de España, “más centrados en destrozar nuestro sistema judicial con disparates como la Ley del ‘sí es sí, apoyada por el PNV, que en apoyar el desarrollo de Álava”.

“Si realmente estamos discutiendo unos Presupuestos aquí pero la mayor parte de nuestros impuestos se los lleva el Gobierno vasco, ¿cómo puede ser que Álava se esté quedando fuera de los principales proyectos de inversión del Gobierno vasco?”, se ha preguntado.

Oyarzabal ha explicado que un Presupuesto es la expresión en cifras de un proyecto político y que, con la negociación presupuestaria en Álava, en el País Vasco y en Madrid, ha quedado claro que el PNV ha elegido como compañero de viaje a Pedro Sánchez y que su modelo es el mismo que el que proponen Podemos y Bildu. “Ya sólo hay dos opciones: el bloque de Pedro Sánchez o el Partido Popular”, ha zanjado.

“Necesitamos una revisión fiscal. Pagamos cada vez más a cambio de cada vez menos inversiones y proyectos para Álava”, ha afeado, para a renglón seguido exponer que la Diputación foral se ha convertido en el recaudador de Íñigo Urkullu y de Pedro Sánchez, “que bloquean sistemáticamente inversiones y proyectos para Álava”.

Como ejemplo, Oyarzabal ha destacado el “escándalo” protagonizado por las instituciones alavesas en torno a la candidatura de Vitoria para albergar la sede física de la Agencia Española Aeroespacial. Mientras el Gobierno vasco boicotea la candidatura de Vitoria y pide al Gobierno de Sánchez que la ubique en Zamudio (Vizcaya), Ayuntamiento de Vitoria y Diputación de Álava o callan o “tiran piedras contra nuestro propio tejado diciendo que Vitoria no está preparada”, ha zanjado. “Vitoria y Álava pagan el pato por el poco peso que el PNV alavés tiene en Bilbao”, ha añadido.

En el País Vasco, ha desgranado, “PNV y Bildu juegan a la discrepancia”, pero “forman parte del mismo bloque de apoyo a Sánchez”. “Son cómplices del daño que se está causando a nuestro país y a los intereses de Álava”, ha insistido. Han negociado traer presos, pero realmente ningún empeño para que lleguen aquí inversiones de calado o proyectos de futuro. Se está negociando traer presos, y resulta que al mismo tiempo permiten que dejen fuera a Vitoria como candidata a albergar la sede de la Agencia Española Aeroespacial”, ha ejemplificado.