El PP se muestra en contra de cobrar peajes en las carreteras y autovías de Álava como quieren PNV y PSOE

  • Borja Monje, procurador de Populares Alaveses en las Juntas Generales de Álava: “Los beneficios que se podrían obtener con el cobro son ahora inferiores a los perjuicios económicos y sociales globales que podrían generar en nuestra sociedad”.
  • El PP ha expuesto diez razones por las que se muestran en contra del cobro con peajes de carreteras y autovías de Álava como que ya están construidas y en servicio y no precisan de financiación externa, por definición son públicas y gratuitas, supondrá una pérdida de competitividad del sector del transporte de mercancías por carretera, conllevará un aumento de los precios de todos los bienes de consumo, generará una importante pérdida en el poder adquisitivo, también subirá la siniestralidad vial al optar los conductores por vías secundarias, castigará a la zona despoblada y minorará la competitividad de la zona rural.
  • “Es un despropósito que PNV y PSOE invoquen que las infraestructuras de comunicación las tienen que pagar sólo quienes las usen. En mayor o menor medida, todos los ciudadanos hacen uso de ellas. Caeríamos en el sinsentido de que los que no tienen hijos en edad escolar no tienen que sufragar la educación, o los que gozan de buena salud no tienen que financiar la sanidad… Todos son servicios públicos y deben ser financiados por el Estado, sin excusas, ni exclusiones”.
  • Los populares consideran que este tipo de decisiones deben plantearse en un periodo de crecimiento y de generación de empleo, y no en un momento de crisis y de subida galopante del IPC como padecemos actualmente.

2 junio 2022.- El PP se ha posicionado en contra del cobro de peajes en las carreteras y autovías de Álava como pretende el PNV y el PSOE. Como ha apuntado el procurador de Populares Alaveses en las Juntas Generales de Álava, Borja Monje, “en estos momentos no se debe aplicar el cobro por el uso de las vías de alta capacidad alavesas porque los beneficios que se podrían obtener con esta medida son ahora inferiores a los perjuicios económicos y sociales globales que podrían generar en nuestra sociedad”.

Además, Monje ha recalcado que este tipo de decisiones deben plantearse en un periodo de crecimiento y de generación de empleo, “y no en un momento de crisis, con el IPC a niveles desorbitados, la cesta de la compra disparada, la electricidad, el gas, la gasolina y el gasoil batiendo récords históricos a diario, el sector del transporte pasando una época difícil, y todo esto, en definitiva, sería una carga inasumible para la economía de muchas familias y empresas alavesas.”

El procurador popular no ha dudado en alertar de que ya desde marzo el PP estaba denunciando que a medida que ha avanzado la ponencia de carreteras para conocer y valorar las diferentes alternativas que pudieran existir sobre el modelo de financiación a aplicar para la conservación de la red de carreteras alavesas a partir del 2026, “el Gobierno Foral del PNV y PSOE la ha utilizado como excusa para imponer una decisión que ya estaba tomada de manera unilateral y también a nivel nacional”.

Borja Monje ha señalado que “esta medida supondrá una limitación del derecho que como ciudadanos nos permite trasladarnos y circular libremente por todo el territorio de nuestro país” y que, además, “las autovías pasarían a tener una consideración mucho más cercana a las autopistas de peaje”.

“Es un despropósito que el PNV y el PSOE invoquen que las infraestructuras de comunicación las tienen que pagar sólo quienes las usen“. Borja Monje, procurador de Populares Alaveses en las Juntas Generales de Álava.

Los populares han detallado diez motivos por los que se oponen a cobrar por el uso de las autovías y autopistas alavesas en estos momentos, entre los que destaca que son infraestructuras de comunicación que ya están construidas y en servicio y no precisan de financiación externa para su ejecución como ocurre con las autopistas; la propia definición de autovías que son infraestructuras públicas y gratuitas, “ya se han pagado con los impuestos de alaveses y españoles y no se deben pagar dos veces o más por lo mismo”; y supondrá una pérdida de competitividad del sector del transporte de mercancías por carretera, que acapara más del 90% de las mercancías que se mueven en nuestro territorio, gravado con peajes que supondrá un notable incremento de los costes de explotación.

Además, Borja Monje ha enumerado más motivos como que conllevará un aumento de los precios de todos los bienes de consumo, ya que el sector del transporte ya ha avisado de que carece de márgenes de beneficio para poder asumir a sus expensas el coste de los peajes. “Al final los ciudadanos pagaremos los peajes dos veces: cuando circulemos por las autovías y cada vez que compremos cualquier bien de consumo”, ha añadido.

Asimismo, el cobro de peajes en vías de alta capacidad generará una importante pérdida en el poder adquisitivo, provocando un grave incremento de la desigualdad; e implicará una notable subida de la siniestralidad vial, puesto que muchos conductores para ahorrarse el coste de los peajes se verán abocados a circular por la red secundaria, peor preparada. También castigará a la zona despoblada, los peajes penalizarán la llegada de sus principales vías de ingresos como el turismo rural y obligarán a sus habitantes a hacer un sobre esfuerzo económico para desplazarse a núcleos más poblados para los servicios básicos. Y vinculado a ello, el cobro de peajes minorará la competitividad de la zona rural, porque sus productos, alimentación, artesanía, etc. tendrán que pagar un sobre coste en el transporte mucho más alto que los producidos en los entornos de las grandes áreas de población.

Para Borja Monje es “un despropósito que el PNV y el PSOE invoquen que las infraestructuras de comunicación las tienen que pagar sólo quienes las usen. En mayor o menor medida, todos los ciudadanos hacen uso de las autovías para desplazarse y atender las necesidades cotidianas, de forma que no hay personas que sí las usen y otros que no”. Y en segundo término porque, conforme a ese razonamiento, “caeríamos en el sinsentido de que los que no tienen hijos en edad escolar no tienen que sufragar la educación, o los que gozan de buena salud no tienen que financiar la sanidad, y así hasta un largo etcétera. Todos son servicios públicos y todos deben ser financiados por el Estado, sin excusas, ni exclusiones”, ha zanjado.